Redacción SFN
Xalapa, Ver.- El cuello de botella que se formó en el área de investigación del Órgano de Fiscalización Superior del estado (ORFIS) estaría siendo generado por malas prácticas y consignas políticas por parte de la auditora general, Delia González Cobos.
Y es que las denuncias presentadas por el ORFIS, en plena veda electoral, hacia los Ayuntamientos principalmente de oposición, corresponden a observaciones que se hicieron en la Cuenta Pública 2021, tomándole 3 años el iniciar los procedimientos jurídicos.
Dicha situación pone en evidencia la situación que se vive al interior de dicho lugar que debería velar por defender los recursos que pertenecen a los veracruzanos.
Los casos donde se presume hay un daño patrimonial son varios, sin embargo se observa un rezago severo, tras notar las denuncias hace unos días en contra de quienes fueron observados hace más de dos años.
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